Nuestra Madre Dolorosa ya se encuentra presidiendo el Altar Mayor de su Parroquia, desde la pasada noche del Miércoles día 17 de Marzo, en la cual el Equipo de Priostía y todos sus componentes, con sumo cuidado y trato procedieron a entronizar a la Señora en un elegante Altar preparado para su Septenario. Sencillo y humilde trono que presenta la Reina al pie de la Cruz, donde predomina el color distintivo y predominante en nuestra Hermandad, el rojo, destacando la plata y los paños bordados, así como los encajes antiguos. Pedestales alzan jarras de plata antiguas del palio con ramos conicos de sobrio y clásico clavel blanco. Bandejas de plata quedan repartidas por el conjunto, junto a candelabros de brazos que acompañan al Santisimo Sacramento.